domingo, 27 de diciembre de 2015

PAFMAN: PAFMAN ACTOR, de Cera (II)



Segunda página interpretada por nuestro héroe en la que podemos ver el desenlace de esta divertida historia. Pafman, tras llegar a casa hecho polvo después de un duro día de trabajo luchando contra el mal, saca a relucir su incumplido sueño de llegar a convertirse en un actor de éxito. La inesperada y frenética visita de su fiel amigo Pafcat le hace llenarse de ilusiones (aún más si cabe). Resulta que, al parecer, el archifamoso director de cine Estiben Espilver quiere reclutarle para su próxima película. Tras pasar a hacerle una visita al sastre del pueblo, con el fin de lucir un aspecto inmejorable y ofrecer una primera buena impresión, ya se encuentra en disposición de atravesar la puerta de entrada de la morada del multipremiado director.

Como cabe esperar, y tras un cálido recibimiento, los planes del Espilver no eran los que Pafman esperaba, y claro, estando libres actores de la talla de Tom Hanks, Harrison Ford o Tom Cruise, ¿cómo se podía esperar que este hombrecillo, al que difícilmente le salen las cosas derechas, pudiera participar en un film de este monstruo consagrado del cine mundial? Pafman, no pasa nada, haz como yo: sigue soñando…



sábado, 26 de diciembre de 2015

MI PRIMERA COLABORACIÓN PARA “FANZIPOTE, EL FANZINE MÁS POTENTE”



Debo reconocer que me gusta atarme la soga al cuello. Justo cuando menos tiempo puedo emplear para dibujar, voy y me embarco en varios nuevos proyectos. Cuando me ofrecieron participar en la revista “Fanzipote, el fanzine más potente”, no me pude resistir. Ésta es una publicación con muchos años a sus espaldas y que, en la actualidad, goza de una segunda época, la cual, sigue apareciendo a la antigua usanza, es decir, impresa en papel.

A pesar de que su tirada es más bien reducida, acepté encantado este nuevo reto, agradeciendo que se acordaran de mí para ofrecerme este puesto de colaborador. Me hubiese gustado poder corresponder como es debido y contribuir elaborando varias páginas para cada número, pero, como he apuntado al principio de estas líneas, cada día me cuesta más encontrar ese rato para sentarme a dibujar. Aún así, esa máquina productiva que es mi cabeza se puso en marcha hace unos meses, abocetando distintos individuos de varios aspectos con la finalidad de crear una serie nueva para esta revista. De este desparrame de creatividad nacieron Nick Manías y Jack Tormento, idiotas de nacimiento, cuya coletilla ya deja bastante claro la inteligencia de estos dos sujetos.

Lo más normal en este tipo de entradas (donde hablo de mis trabajos ya publicados) hubiese sido colocar, al pie de estas líneas, la página en cuestión, pero pienso que, adelantar parte del contenido de este número 7 del “Fanzipote” sería cometer un crimen por mi parte. Aún así, y para no dejar a nadie con la miel en los labios, muestro la cabecera de la serie y una viñeta, elegida al azar, correspondiente a esta primera aventura de la pareja.







Para todo aquel que pueda estar interesado en hacerse con este número (o con cualquier otro ya publicado), puede solicitarlo en la siguiente dirección de correo electrónico: fanzipote@gmail.com, al módico precio de 3,50 euros más gastos de envío. Os puedo garantizar que no tiene desperdicio. El mejor regalo para estas Navidades.





 Aunque mi nombre no aparece en el índice de este número 7, Nick Manías y Jack Tormento han salido publicados en la página 62.

domingo, 20 de diciembre de 2015

ESPECIAL: NAVIDAD 2015



Un año más, llega el frío de forma irremediable y, con él, las fiestas de Navidad, tan añoradas y queridas por casi todos los mortales y también por el que esto escribe. Sin duda, los que más disfrutan de estos días (donde no faltan regalos, dulces de toda índole e ilusiones) son los más pequeños de la casa. Sus corazones se colman de felicidad y, de forma misteriosa y mágica, se obligan a sí mismos a mejorar su comportamiento ante la inminente llegada de los Reyes Magos. Ya se sabe, cuánto más bueno has sido durante el año, más regalos recibirás por parte de estos tres incansables repartidores de ilusiones (no me estoy refiriendo, claro está, a los vendedores de cupones). Por el contrario, si tu conducta a lo largo de estos últimos 365 días ha sido nefasta, no esperes grandes sorpresas porque, con la que está cayendo, ya no te dejarían ni un miserable pedrusco de carbón. Pero los Magos, a pesar de su avanzada edad y de los mazazos que les habrá dado la vida, siguen teniendo su corazoncito, así que, si te hallas entre los que se han comportado de un modo gamberrete, tranquilo, seguro que no te quedas con las manos vacías.

Entre atracones de dulces navideños y desmesuradas comilonas (donde no puede faltar el buen marisco y el mejor de los vinos), un servidor ha hecho un hueco en su apretada agenda para elaborar la ilustración que se muestra a continuación (¡ay, qué bien se trabajaba en el silencio de la madrugada!). Con los Magos de Oriente como auténticos protagonistas, me enfrenté a un dibujo repleto de detalles, gags secundarios y humor más negro que blanco donde es más difícil toparse con un hueco vacío que con el mismísimo Spielberg en plena calle. Mi tiempo era escaso, y la fecha límite de publicación amenazaba a la vuelta de la esquina, aún así, aproveché cada minuto de los pocos que me quedaban libres para sentarme tranquilamente a dibujar. Sin prisas. Recomiendo dedicar unos segundos a contemplar cada uno de los múltiples detalles con detenimiento. Creo que merece la pena.

Ahora sí, y con la esperanza de que los Reyes Magos anden más centrados que los que aparecen en mi dibujo, os deseo a tod@s una Feliz Navidad y un próspero año 2016.



sábado, 19 de diciembre de 2015

PAFMAN: PAFMAN ACTOR, de Cera



Mucho tiempo llevaba un servidor buscando originales de Joaquín Cera por todos los rincones del país y parte del extranjero. Tras intensas búsquedas por tierra, mar y aire, siempre regresaba a casa con las manos vacías tras darme con la puerta en las narices. Cierto día, y como por arte de magia, el propio autor decidió poner algunas de sus páginas a la venta. A partir de ese momento, vi la oportunidad perfecta para sacarme esa espinita que he llevado clavada durante tanto tiempo y, por fin, ya lucen páginas tan bonitas como la que he expuesto al final de estas líneas en mi preciada colección de planchas originales. Antes de meterme de lleno en comentar esta página correspondiente a la aventura Pafman actor (publicada en el número 152 de la revista “Mortadelo”), conozcamos un poco mejor a su creador: Joaquín Cera.




Cera (Joaquín Cera Barrios) nació en Barcelona en 1967. Aunque, con toda probabilidad, empezó mucho antes a llenar folios con sus primitivos personajes, entre 1984 y 1985 recibió lecciones sobre el mundo de la historieta en la Escuela Joso (fundada en 1982 por el dibujante del mismo nombre).

Sus primeras páginas publicadas fueron para la desaparecida Editorial Bruguera, más concretamente, en la sección Los bebés de la historieta (aparecida en la revista “Mortadelo Especial”), pasando a formar parte de la plantilla de la editorial cuando ésta ya se encontraba al borde del abismo. Tras el cierre definitivo de Bruguera, Cera ficha por Ediciones B (heredera de la antigua editorial) en 1987, realizando páginas de diversos personajes para varias revistas de la nueva casa. Sólo unos pocos años más tarde, entrada la década de los noventa, el trabajo empezaba a acumularse sobre su mesa, publicando sus páginas en las revistas “TBO”, “Súper Mortadelo” y “Súper Zipi y Zape”, coincidiendo con monstruos de la historieta como Jan, Raf, Escobar o el mismísimo Ibáñez. Fue entonces cuando vieron la luz Pafman o El Dr. Pacostein, personajes tan divertidos como entrañables, así como un buen número de páginas en colaboración con otro de los dibujantes estrella de Ediciones B: Juan Carlos Ramis. Tras varios años de reconquista, la crisis empezó a amenazar desde lo alto y las revistas publicadas por Ediciones B entraron en vías de extinción. En 1996, y tras la total desaparición de todas estas publicaciones, casi todos los dibujantes de la casa, excepto Jan e Ibáñez, fueron despedidos. A partir de aquí, la editorial se centró sólo en la publicación de álbumes, fulminando todas sus revistas.







Tras su despido, Cera encontró un hueco en el mundo de la televisión, trabajando como guionista del programa Con mucha marcha, presentado por Leticia Sabater, y en varias series de dibujos animados de la productora Neptuno Films. Cierto día, y con las miras puestas en resucitar a Zipi y Zape, Ediciones B volvió a llamar a su puerta. Así pues, y contando con la colaboración de su buen amigo Ramis, los hermanos más famosos del mundo del cómic volvieron a la palestra a lo largo de 8 únicos números, volviendo a desaparecer sin previo aviso. Pero el tándem Cera-Ramis seguía en activo, dibujando páginas de otros de sus personajes más gamberros y longevos: Los Xunguis, unos (nada) amigables extraterrestres que acaban liándola parda allí por donde pisan y que vieron la luz, por vez primera, en 1992.







En 2004, y tras varios años de hibernación, regresó Pafman, el superhéroe más alocado del panorama nacional con permiso de Superlópez. Pero las alegrías duraron poco, ya que, la misma editorial que propuso su relanzamiento, algunos números después, ordenó su incineración. Una lástima.

Pafman nació en 1987, en el número 5 de la revista “Mortadelo” (su primera historieta se tituló: El secuestro). En sus inicios, sus aventuras se desarrollaban a lo largo y ancho de dos páginas, pero, dado el éxito del personaje, éstas pasaron a ser cuatro en poco tiempo. Pafman, el superhéroe español por excelencia, luchó contra el mal (o lo intentó) e hizo y deshizo como le dio la gana hasta 1996, año que Ediciones B decidió arrojarlo al fondo del mar atado a una gigantesca rueda de molino. Pero nuestro héroe, como tal, logró liberarse de sus ataduras y emergió de las profundidades, llegando de nuevo a las tiendas en 2004 con una nueva aventura larga: Pafman redevuelve.

Así, y a lo largo de los años siguientes, aparecieron los álbumes: La noche de los vivos murientes (publicado en 2005), Pafman in U.S.A. (2006), Cabezones del espacio (2007), 1944 (2008), Agente cero cero patatero (2009) y Pafdark, el cabestro oscuro (2010), de periodicidad anual. Ya en 2011, con el álbum En la tierra mediocre, la serie estrena nuevo formato y nueva colección, pasando de los tradicionales Top Cómic a Las crónicas de Pafman, donde los volúmenes ganan en número de páginas pero pierden en tamaño y, encima, pasan al blanco y negro. Su siguiente álbum: La aventura del Titaidón, publicado en 2013, es, de momento, el último publicado del personaje. Lo más lamentable es que, hasta la fecha, no hay prevista ninguna nueva aventura.


 Página original de Pafman, de Joaquín Cera.

domingo, 13 de diciembre de 2015

LA GUERRA DE LOS MUNDOS, de Ibáñez, Monzón, Enrich, Pueyo y García Lorente



La que hoy muestro es la página original número 200. Para celebrar tal cifra, he escogido, entre las muchas planchas que componen mi colección y que aún permanecen inéditas en este blog, este impresionante original de gigantescas dimensiones compuesto por varios chistes de diversos autores y publicado en la revista “Alex”, de Badía Romero.

La página está formada por 14 chistes (todos relacionados con la mítica película dirigida por Byron Haskin en 1953 y que da nombre a esta sección) y una divertida y muda historieta central protagonizada por unos simpáticos individuos que acuden a una sala de cine para disfrutar con La guerra de los mundos. Tanto esta breve historieta como cada uno de los 14 chistes que figuran alrededor de la misma, fueron recortados y montados sobre una cartulina de gran tamaño (47 x 68 cm). Esta doble página de La guerra de los mundos, como he apuntado más arriba, se publicó en las hojas centrales del número 9 de la revista “Alex”, de Editorial Símbolo, allá por 1955. Esta publicación, de la que salieron tan sólo 10 números, fue creada por Enric Badía Romero (autor de la serie Axa, de corte fantástico y de ciencia ficción), bautizando a su nueva criatura con el mismo nombre de los estudios que se ocuparon de su dirección técnica: Estudios Alex.

Aquí podemos disfrutar de pequeños (y muy interesantes) trabajos realizados con gran acierto por Daniel Monzón (suya es la historieta central, el título que da nombre a la página y 3 chistes), Enrich (el creador de El Caco Bonifacio se encargó de dibujar otros 3 chistes), Pueyo (3 también son suyos), Francisco Ibáñez (el maestro ilustró otros 3) y García Lorente (dibujando los 2 restantes).  



sábado, 12 de diciembre de 2015

LOS SERIALES DE IBÁÑEZ: LOS TRES MOSQUITOS



Tras varios años de colaboración, donde el maestro tuvo un papel muy importante en las páginas de la revista “La Risa”, la relación existente entre Ibáñez y Editorial Marco se acabó (aunque no de manera no oficial), dando lugar a la extensa y fructífera etapa Brugueriana.

A pesar de haber cambiado de empresa, el maestro siguió trabajando para la editorial anterior ya que su relación con el editor era bastante buena. Esos trabajos publicados “de extranjis” (por así decirlo) a finales de los años cincuenta, figuraban siempre como anónimos, pues Ibáñez no los firmaba por miedo a represalias con Bruguera, su nueva casa.

Por aquellos entonces, Ibáñez ya había creado a sus personajes más longevos y populares: Mortadelo y Filemón, y el volumen de trabajo del maestro empezaba a crecer de un modo imparable. Aunque eso no impedía que continuara con sus anónimas labores para Editorial Marco. Fue entonces cuando nacieron Los tres mosquitos (serie de dos páginas nacida en el número 179 de “La Risa” y publicada en esta revista hasta el número 192) o Furgensio (personaje del que ya hablé en esta misma sección hace algún tiempo y que fue publicado en 1960, año que Ibáñez abandonó Marco de forma definitiva). 


 Cabecera de la serie e imagen de los tres mosquitos.

Pero esta colaboración a dos bandas no duró mucho; en Bruguera cada vez se le exigía más y los días sólo tenían 24 horas. Para que nos hagamos una idea, de las siete páginas semanales que Bruguera encargó inicialmente al maestro, pasaron a ser once, después quince y, posteriormente, veinte, aunque hubo semanas que llegó a entregar hasta veintidós páginas. Sí, han leído bien.












lunes, 7 de diciembre de 2015

CHISTES VARIOS, de Cifré



Mucho tiempo llevo sin hablar de Cifré en este blog y hoy me gustaría volver a hacerlo. Después de casi tres años sin mostrar nada nuevo de este autor, regalo a la vista del lector una bonita página original compuesta por una tira en formato vertical y un chiste a gran escala.

El creador de Amapolo Nevera, El Repórter Tribulete o Don Tele nos brinda con una pequeña muestra de su talento y su buen hacer para conseguir despertar unas cuantas carcajadas. La tira de ese tipo hablando con la señora fantasma y el chiste del mayordomo cansado de subir y bajar escaleras son sublimes.   



sábado, 5 de diciembre de 2015

¡100.000 VISITAS DESPUÉS…!



Cumplidos los 4 años y 8 meses de vida de este blog, fue el pasado día 4 de diciembre (2015) cuando conseguimos encumbrar la cima y alcanzar la distinguida cifra de… ¡100.000 visitas!

Recuerdo perfectamente el día que me senté frente a mi ordenador a redactar aquella entrada especial correspondiente a la celebración de las 10.000 primeras visitas. Ha pasado ya algún tiempo de aquello, pero parece que fue ayer. Sólo hizo falta que transcurriera el primer año y medio desde que publiqué la primera entrada de este blog (hoy más de cuatrocientas) para conseguir un número de visitas considerable. A lo largo de los 18 meses siguientes, los registros se multiplicaron y el contador reflejó la friolera de 50.000 visitas.

Ahora, 20 meses después de aquella cifra tan redonda, las visitas siguen en continuado aumento y la cifra alcanzada ya supera las 100.000 lecturas. Un servidor, sintiéndose arropado por el resto de los mortales, repone energías para seguir en la brecha durante unos cuantos milenios más, con fuerzas renovadas y con los ánimos en plena erupción, ansioso por acariciar con mis manos las próximas 250.000 visitas. Seamos pacientes, no queda tanto...









domingo, 29 de noviembre de 2015

EL CAPITÁN TRUENO, EL ÚLTIMO COMBATE, de Joan Boix



Nuevo original de Joan Boix que, desde hace un tiempo, forma parte de mi extensa y preciada colección. La presente página (la número 1) sirvió como punto de partida del álbum El último combate, protagonizado por El Capitán Trueno y todos sus amigos y, posiblemente, el que más polémica ha cosechado en toda la historia del personaje.




Dibujado entre finales de 2009 y principios de 2010 (año que fue publicado por Ediciones B) por el maestro Joan Boix a raíz de un guión firmado por Ricard Ferrándiz, quien continuó escribiendo sus aventuras y dibujando al personaje en los álbumes Atlántida (publicado en 2011) y La espada del invencible (publicado en 2013), en El último combate nos encontramos con un Capitán Trueno, ya entrado en años, que vive exiliado en la soledad de su castillo de Ampurdá tras la trágica muerte de Sigrid. Cierto día, un desconocido llama a su puerta en busca de refugio. Aquel anónimo visitante portaba en sus manos unos cotizados manuscritos que formaban parte de un valioso tesoro, los cuales, eran perseguidos por el inquisidor de Toulouse, quien no duda en ordenar a su sanguinario ejército que atente contra los ocupantes de aquel apacible y solitario castillo con la única finalidad de que aquellos pergaminos cayeran en su poder. Este improvisado ataque obliga al Capitán Trueno a empuñar de nuevo su espada después de tanto tiempo y a volver a reunirse con sus viejos amigos para lograr acabar, reforzados por la ayuda de los Templarios, con las fuerzas del mal.

Esta historia se bautizó, inicialmente y ante el asombro de todos los fans del héroe, como La muerte del Capitán Trueno*, título que, enseguida, fue sustituido por el definitivo El último combate. Y la polémica estaba servida. Esta no fue la primera vez que Boix se ocupó de dar vida a Trueno, ya que, en 1990, apareció, con gran éxito, el cuadernillo Cita en Córdoba, ilustrado por este autor y escrito por Víctor Mora, guionista original de la serie. En este primer encuentro con el personaje, Joan Boix trató de ser lo más fiel posible al estilo plasmado por Ambrós, propósito que no tuvo tan en cuenta en El último combate, donde, conservando la esencia del dibujante original, aquí vemos un trazo más de Boix que de Ambrós.

De la presente página destacar que corresponde a la número 1 de esta aventura, que incluye una impresionante y detallada primera viñeta inicial y que nos regala la primera aparición de Trueno en El último combate.

*En las últimas páginas del álbum, podemos ver cómo el inmortal Trueno es vencido en plena batalla. 


 Página original de El último combate, dibujada por Joan Boix y dedicada por el autor.




sábado, 28 de noviembre de 2015

ACUESTE YA A SUS BORREGOS, Y LEA ESTOS CHISTES DE VIDEOJUEGOS (II)



Para esta semana me he reservado la segunda página de esa historieta que dibujé para el “Cretino” número 38 (16 en digital) dedicado a los videojuegos. Conservando la misma estética de la hoja anterior (de otro modo, no tendría ningún sentido), ha llegado el turno de seguir repasando aquellas parodias que un servidor tuvo el bien de realizar de algunos de los videojuegos más míticos que haya parido madre.

Arrancando con una divertida primera viñeta en la que los protagonistas son Sonic y su amigo Tails, ese zorro amarillo de dos colas (Gollum es un simple secundario), continuamos con Resident Evil (y los complejos de belleza de uno de sus cuantiosos monstruos), el bestial Donkey Kong (que saca a relucir, una vez más, su famosa mala gaita), los tiernos bichitos de Bubble Bobble (plasmando una de sus muchas noches de resaca de estos dos simpáticos dragoncillos amantes de las burbujas y del buen vino), el malogrado Bomberman (que de haber sido creado hoy se le hubiese encarcelado por terrorista) y Asteroids (el Australopithecus de los videojuegos).

Y hasta aquí mi humilde colaboración para aquel número 38 del “Cretino Digital”. Espero que haya sido del agrado de todos y que, a aquellos que empezáis a lucir canas, os haya hecho recordar vuestra más tierna y bonita infancia.

Fin del juego.



domingo, 22 de noviembre de 2015

LOS TRES MOSQUITOS, de Kito



Llevaba bastante tiempo circulando por Internet la noticia de que Kito e Ibáñez eran la misma persona. Yo siempre lo negué. Supuestamente, los años en los que el maestro estuvo trabajando para Editorial Marco (década de los cincuenta), utilizó varios seudónimos para firmar sus páginas, entre ellos, el ya mencionado nombre de Kito. Y las masas seguían lanzando suposiciones; hasta buscaron una posible explicación a este sobrenombre. El dueño de la editorial, Tomás Marco Debón, llamaba a aquel joven Ibáñez por el diminutivo de Francisquito, de ahí que firmara utilizando las últimas cuatro letras de este vocablo: (Francis) Kito. La noticia se extendió por la red como una llama sobre un rastro de gasolina, provocando confusión a los expertos en la obra de Ibáñez y fabricando, así, un falso mito que hoy continúa (aunque en menor medida) en boca de todos.

Yo no lo vi tan claro como lo hizo la gran mayoría. Aunque es cierto que el estilo de ambas firmas (F. Ibáñez y Kito) era casi el mismo, siempre existían pequeños detalles que no acababan de cuadrar. Y yo seguía contrariando esa falsa información que muchos creyeron cierta.

Finalmente, y gracias a una laboriosa y necesaria investigación por parte del amigo Hergest, administrador del blog Pensión el Calvario, el 26 de noviembre de 2012 pudimos descubrir (a mí no me pilló de susto) que Ibáñez y Kito eran dos personas distintas (y muy buenos amigos). Han pasado varios años desde que se destapó este misterio, pero aún, hoy en día, hay gente que sigue perjurando que el maestro firmó con el nombrado seudónimo. No hay más ciego que el que no quiere ver…

Aclarado este punto que considero de gran importancia, el lector ya se encuentra en disposición de conocer a este prolífico autor desconocido por la gran mayoría.




Kito (Francisco Pérez Espinosa) nació en 1937 en el vecino pueblo de Los Ramos (Murcia). Sus inicios como dibujante los hallamos en un periódico de la región llamado “Línea”, allá por 1953. Para este diario creó la sección Nuestros bonitos pronósticos que, tal y como su nombre indicaba, y mediante unos divertidos personajes, debía predecir el resultado de los partidos de fútbol antes de que se jugasen.




En 1955 se traslada a vivir a Barcelona. Poco después, aparece una nueva revista: “Sandalio”, para la que Kito crea a su primer personaje: Paco Carpeta, un desdichado historietista que deambula de un lado para otro en busca de un trabajo digno como dibujante.




Al año siguiente (1956), ficha por Editorial Marco para trabajar en su revista “La Risa”. Allí coincide con el resto de la plantilla de dibujantes: Martínez Osete, Raf, Ibáñez, Ripoll, Belindo..., todos bastante jóvenes. Se le encarga volver a montar varias páginas de Emili Boix publicadas en la revista “Hipo, Monito y Fifí” tras la marcha de este dibujante a tierras americanas, además de colorear varios cuadernos de Martínez Osete y rotular diversas páginas. Con el tiempo, se encargaría de la continuidad de Levy Berzotas, Sherlock Gómez (ambas de Raf) o Los Tres Mosquitos (de Ibáñez), cuando estos dibujantes se marcharon a Editorial Bruguera. 








A principios de los sesenta, empieza a publicar en la revista femenina “Babette”, de Ediciones Toray, dibujando al personaje del mismo nombre con guiones ajenos. Su estilo aquí era muy distinto al plasmado en Editorial Marco, donde se le notaba una fuerte influencia ibañezca. Pero su hazaña duró poco, ya que la censura acabó con esta revista cuando sólo se había publicado el primer número. Tras este batacazo, Kito siguió trabajando para Toray en “Fulgor” y “Hazañas Bélicas”.










A los pocos meses, este autor se traslada a París, lugar donde empieza a publicar en diversas revistas de la época: “Le Herisson”, “París Presse” o “Frimousse”. Entre sus numerosos trabajos, cabe destacar el realizado en la serie El Florocof Romos, escrita por René Goscinny (guionista de Astérix, Lucky Luke o Iznogud) y publicada en la revista “Pilote” (de la que Goscinny fue cofundador y director). 




Tras disminuir su volumen de trabajo debido a la decadencia de las revistas para las que trabajaba, Kito regresa a Barcelona. Poco después, recibe una suculenta oferta de Bruguera que Kito no duda en rechazar. Las condiciones impuestas no son del agrado del autor ya que la editorial era quien se quedaba con todos los originales y el sueldo era bastante inferior al que cobraba en las revistas francesas. Por estas razones, Kito decide apartarse del dibujo y empieza a trabajar como vendedor en una inmobiliaria, por cierto, con bastante éxito.

En 1974, regresa a su Murcia natal, concretamente, al pueblo de Águilas, lugar donde vivió durante bastantes años. Retomó su carrera como dibujante, publicando en varios periódicos de la región como: “La Verdad de Murcia”, “El Diario de Murcia”, “La Voz de Murcia”, “El Más Deportivo” y “La Opinión de Murcia”.

En la actualidad, disfruta de una merecida jubilación ocupando su tiempo en otra de sus grandes pasiones: la pintura. 


 Página original de Los Tres Mosquitos dibujada por Kito.

sábado, 21 de noviembre de 2015

ACUESTE YA A SUS BORREGOS, Y LEA ESTOS CHISTES DE VIDEOJUEGOS (I)



El número 38 (16 en su edición digital) de la revista “Cretino Digital” estuvo dedicado al universo de los videojuegos. Hoy me hallo bastante apartado de este mundo (¡ay, mi horrible falta de tiempo libre!), pero confesaré que, hace tiempo, hubo un día en que un servidor llegó a declarar su amor a su impasible consola de videojuegos. La de horas que habré pasado sentado frente a la pantalla del televisor aplastando marcianitos. 




Por esta razón, y aunque pueda parecer que vivo anclado en el pasado, mi colaboración para ese número 38 se basó en parodiar los videojuegos más sonados de la época que se dignaron a envejecer a mi lado. La cubierta de dicha publicación fue obra de Dani Hellez (magistral trabajo, por cierto), y las páginas 30 y 31 fueron dibujadas por un servidor. Arrancando con una primera viñeta que recoge el título de esta historieta de dos páginas (con la habitual coletilla haciendo la rima), las 11 restantes fueron transformadas en antiguas pantallas de televisión en donde los personajes principales de varios juegos de video conseguían campar a sus anchas.

Así, para esta primera muestra, se dieron cita: el gran Mario Bros. (quién no ha tenido pesadillas con aquella musiquilla…), el tragón de Pacman (la de puntitos blancos que habré devorado…), el osado Alex Kidd (me volvió un adicto al juego de “piedra, papel o tijera”), el inmortal Tetris (no existe cifra para contabilizar las horas que habré pasado encajando piezas sobre aquel fondo oscuro) y, como no, Street Fighter (todavía se me saltan las lágrimas al recordar mi juego de lucha favorito). 




P.D.: Para la siguiente entrada me reservo la página número 2, cuyas viñetas están protagonizadas por el resto de personajes. Press start to continue? 9, 8, 7, 6…

domingo, 15 de noviembre de 2015

KOKOLO, de Francisco Ibáñez (Parte IV)



Esta semana, cerramos este especial dedicado al personaje de Kokolo con una página dibujada por Ibáñez, su creador.

Tras una primera plancha de Pueyo y dos dibujadas por Pont (dibujantes que se encargaron de este personaje tras la marcha de Ibáñez a Bruguera), hoy expondré, como eje central de esta entrada y a modo de conclusión, una divertida página publicada en la revista “La Risa” en donde un jovenzuelo Ibáñez (tengamos en cuenta que creó a este simpático individuo con tan sólo 19 primaveras) hizo uso de su directo e inagotable sentido del humor.

Un cartel clavado en el tronco de un árbol pone al corriente al jefe de Kokolo sobre un inminente campeonato en el que se dará una recompensa (nada más y nada menos que una vespa) al audaz que cace más leones. Kokolo, haciendo uso de su ingeniosa habilidad, se inscribe al mismo (o eso es lo que Ibáñez nos quiere hacer creer) sin la necesidad de usar arma alguna. Esta valentía deja boquiabierto a su jefe, quien no duda en comunicarlo al resto de sus colegas cazadores. Finalmente, y alertados por el bullicio que se forma en una apartada orilla, comprueban con sus propios ojos que las intenciones de aquel supuesto héroe eran bien distintas. ¿Por qué perder el tiempo y la salud cazando leones cuando puedes matar el rato jugando unas partidas al futbolín?

P.D.: Conviene no pasar por alto la forma en que Ibáñez traza la última letra de su firma. No es lo más común que el maestro altere su rúbrica (desde su primera página publicada sigue firmando igual que hoy), pero cierto es que, alguna vez, se ha podido ver la “z” trazada de esa forma.



domingo, 8 de noviembre de 2015

KOKOLO, de Pont (Parte III)



Tercera página original protagonizada por el entrañable Kokolo y la segunda dibujada por Pont. Al igual que la anterior plancha del mismo autor, aquí vuelve a presentarnos una historieta muy divertida concentrada, únicamente, en una sola página.

El jefe (por llamarlo de algún modo) de Kokolo tiene la maquiavélica ocurrencia de salir a cazar avestruces (el hombre no tenía nada mejor que hacer ese día). Para ello, no inventa otra cosa que embutirse en un disfraz de avestruz para lograr pasar desapercibido. Sale a la calle ataviado con esas pintas y, cuando se dispone a dar caza al primer macho que se le cruza por el camino, el bonachón de Kokolo, haciendo aparición en escena, le hace pagar por su sanguinaria idea, eso sí, sin ser consciente de ello.

Pont nos presenta una página muy bien elaborada, con personajes algo más sueltos que en su anterior trabajo mostrado aquí hace justo una semana. Las posturas de los protagonistas de esta historia también son más comunes, y el estilo se ciñe más al creado por su mentor: Francisco Ibáñez.