Ésta va a ser una semana grande (y no la de El Corte Inglés), por lo menos, en cuanto a mi blog se refiere. Además de publicar un nuevo dibujo como de costumbre, hoy inauguro esta sección en la que iré mostrando mi pequeña colección de dibujos originales de autores de prestigio, que espero, con ganas, que se vaya ampliando poco a poco.
Quiero comenzar esta nueva aventura con la primera página (o lo que queda de ella) que llegó a mis manos: Currito Farola, er niño e la bola, del genial Manuel Vázquez (ya se sabe, aquel que también creó a Anacleto o las Hermanas Gilda). Editorial Bruguera ordenó “limpiar” sus archivos y destruyó una cantidad inimaginable de páginas originales creadas por diversos dibujantes, entre los que se encontraban Cifré, Escobar, Vázquez o Ibáñez. Por suerte, algunas de estas personas que fueron ordenadas a destruir uno de los mayores tesoros del país, guardaron trozos de estas páginas mutiladas conscientes de que aquello tenía un valor económico aparte del emocional.
Vázquez (Manuel Vázquez Gallego) nació en Madrid en 1930. Publicó su primer dibujo en 1942 en la revista “El automovilismo en España”, e inició su carrera profesional en el cuaderno “Macana en el Oeste”, publicado por Hispano Americana de Ediciones en 1946. Justo al año siguiente, empezó a trabajar en la revista “Flechas y Pelayos”, donde publicó su primera serie: Mr. Lucky.
A finales de 1947 o principios del año siguiente, Vázquez ficha por Editorial Bruguera y, poco después, de traslada a vivir a Barcelona.
En 1949, creó a sus archiconocidas Hermanas Gilda y, a su vez, colaboró con distintas editoriales. En 1951, creó a Don Binomio e hijo, S. L. para la revista “Pulgarcito”, y Azufrito, Currito Farola y La Familia Cebolleta para “El DDT”. En 1953, sustituye a Azufrito por Ángel Siseñor.
En 1955, contrae matrimonio con Aurora Medrano y, fruto de esta relación, nacen tres de sus hijos.
Su carrera profesional subía como la espuma. Entre 1958 y 1960, crea nuevos seriales para distintas revistas: La historia esa vista por Hollywood (que, posteriormente, pasaría a las manos de un primerizo y joven Ibáñez), La Osa Mayor (agencia teatral), La familia Gambérrez y La familia Churumbel. Entre 1961 y 1963, sus series pasaron a manos de otros dibujantes, como Sanchís o Martz Schmidt, y Editorial Bruguera lo denunció en 1963 por falsificación de recibos y robo. Ese mismo año, Vázquez se marcha de casa, abandonando a su familia.
Creó a Angelito en 1964, y a Anacleto, agente secreto en 1965, una de sus series de mayor éxito. En 1978, deja a un lado las publicaciones infantiles y empieza a crear series para revistas de adultos. A partir de ahí, en ocasiones, firmaba con el pseudónimo de “Sappo”. En 1982, y a raíz de la suspensión de pagos de Bruguera, Vázquez buscó otras revistas donde publicar sus trabajos, entre ellas, “JAuJA”, “Garibolo”, “Bichos”, etc.
Vázquez falleció en 1995 en Barcelona, a los 65 años, a causa de una embolia cerebral provocada por la diabetes.
Su forma de ser y su falta de disciplina le impidieron llegar aún más alto, pues no cumplía con la entrega de sus páginas en la editorial y siempre tenía problemas económicos, de los que salía airoso debido a su gran ingenio y su habilidad para el engaño. Vázquez siempre se sintió orgulloso de ello, y él mismo ayudó a forjar la leyenda que hoy se cuenta sobre su intensa vida.
Según confesó él mismo, contrajo matrimonio en siete ocasiones (no demostrables), y tuvo once hijos fruto de estos supuestos matrimonios. También confesó que estuvo tres veces en la cárcel, aunque tampoco se puede demostrar.
Centrándonos un poco en el personaje de Currito Farola, er niño e la bola, como ya he comentado anteriormente, fue creado por Vázquez en 1951 para la revista “El DDT” y representa al andaluz de la época vestido de forma folclórica.
Residente en Barcelona (aunque nació en Sevilla), entre otros aspectos, destacan de este personaje su acento andaluz y su pasión por los toros. Currito Farola apareció por primera vez en el primer número de la citada revista, haciéndolo de forma continuada hasta el número 8. Posteriormente volvió a aparecer en el número 28, siguiendo hasta el 41, donde se publica su última historieta (Vázquez acaba con el personaje arrojándolo al mar encadenado a una bola de preso).
Si hacemos la cuenta, Vázquez creó un total de algo más de veinte páginas de este curioso personaje y, teniendo en cuenta que yo tengo parte de una de esas páginas, para mí, lo hace aún más curioso.
Página original de Currito Farola, de Vázquez.
Estás introduciendo nueva temática en tu blog y cuesta un poco digerirla toda al tiempo. Creo que deberías ir alternando entre tus dibujos y los originales para apreciar así la calidad de lo que vas escribiendo. Sé que te cuesta esperar porque no todos los días se encuentra uno con un original en sus manos, pero creo que aśi el lector sabrá apreciar más tu trabajo.
ResponderEliminarComo dices el gran Vázquez, desconocido para muchos, tuvo su protagonismo pero la falta de constancia y disciplina hicieron que no hubiera triunfado más. También culpa la tuvo su grave problema de salud que hizo que falleciera antes de tiempo.
El original, aún no estando en perfectas condiciones por lo que comentas, está bastante bien pues el trazo se ve perfectamente y el uso del corrector los trozos pegados después. Esto dice mucho del proceso de elaboración de antaño (muchas páginas y poco tiempo) y sorprende cómo se las apañaban para que al final luciera un buen dibujo cuando se compraba en las tiendas. Me gusta mucho esta nueva iniciativa que has tomado para mostrarnos tu museo. ¡Enhorabuena!