Recién
entrado el año 1958, el maestro creó sus dos primeras series para la recién
estrenada casa (Editorial Bruguera): Mortadelo y Filemón, que aparecieron en
enero, y Don Adelfo, que dio sus primeros pasos en febrero del mismo año.
Me gustaría añadir que, a pesar de que Mortadelo y Filemón empezaron a
publicarse en enero (de 1958), como bien he dicho, Francisco Ibáñez ya había
creado a sus longevos personajes el año antes, es decir, sobre noviembre o
diciembre de 1957. Ahora que ya respiro tranquilo matizando esto, sigamos con
la antología de los personajes del maestro. Vayamos por partes.
Cabecera de la serie.
Don Adelfo.
Don
Adelfo apareció en el número 0 de la nueva revista “Can Can” en un formato de doble tira. Este curioso personaje
actuaba como una especie de extraño consejero sentimental (un ejemplar de
Cupido con cierto aire de mendicante) con el único fin de crear nuevas
relaciones pasionales o de mejorar las ya existentes. Sus aventuras fueron
publicadas de forma eventual hasta 1959. Editorial Bruguera creó la revista “Can Can” para competir con “Tío Vivo”, aunque, realmente, la de
Bruguera era una publicación dirigida al público adulto. Además de la firma de
Ibáñez, en esta revista podían verse las de Armando Matías Guiu, Alfonso Paso,
Manuel Vázquez, Peñarroya, Gin y Segura.
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