Mucho tiempo llevaba un servidor
buscando originales de Joaquín Cera por todos los rincones del país y parte del
extranjero. Tras intensas búsquedas por tierra, mar y aire, siempre regresaba a
casa con las manos vacías tras darme con la puerta en las narices. Cierto día,
y como por arte de magia, el propio autor decidió poner algunas de sus páginas
a la venta. A partir de ese momento, vi la oportunidad perfecta para sacarme
esa espinita que he llevado clavada durante tanto tiempo y, por fin, ya lucen
páginas tan bonitas como la que he expuesto al final de estas líneas en mi
preciada colección de planchas originales. Antes de meterme de lleno en
comentar esta página correspondiente a la aventura Pafman actor (publicada en el número 152 de la revista “Mortadelo”), conozcamos un poco mejor a
su creador: Joaquín Cera.
Cera (Joaquín Cera Barrios) nació
en Barcelona en 1967. Aunque, con toda probabilidad, empezó mucho antes a
llenar folios con sus primitivos personajes, entre 1984 y 1985 recibió
lecciones sobre el mundo de la historieta en la Escuela Joso (fundada en 1982
por el dibujante del mismo nombre).
Sus primeras páginas publicadas
fueron para la desaparecida Editorial Bruguera, más concretamente, en la
sección Los bebés de la historieta (aparecida
en la revista “Mortadelo Especial”),
pasando a formar parte de la plantilla de la editorial cuando ésta ya se
encontraba al borde del abismo. Tras el cierre definitivo de Bruguera, Cera
ficha por Ediciones B (heredera de la antigua editorial) en 1987, realizando
páginas de diversos personajes para varias revistas de la nueva casa. Sólo unos
pocos años más tarde, entrada la década de los noventa, el trabajo empezaba a
acumularse sobre su mesa, publicando sus páginas en las revistas “TBO”, “Súper Mortadelo” y “Súper
Zipi y Zape”, coincidiendo con monstruos de la historieta como Jan, Raf,
Escobar o el mismísimo Ibáñez. Fue entonces cuando vieron la luz Pafman o El
Dr. Pacostein, personajes tan divertidos como entrañables, así como un buen
número de páginas en colaboración con otro de los dibujantes estrella de
Ediciones B: Juan Carlos Ramis. Tras varios años de reconquista, la crisis
empezó a amenazar desde lo alto y las revistas publicadas por Ediciones B
entraron en vías de extinción. En 1996, y tras la total desaparición de todas
estas publicaciones, casi todos los dibujantes de la casa, excepto Jan e
Ibáñez, fueron despedidos. A partir de aquí, la editorial se centró sólo en la
publicación de álbumes, fulminando todas sus revistas.
Tras su despido, Cera encontró un
hueco en el mundo de la televisión, trabajando como guionista del programa Con mucha marcha, presentado por Leticia
Sabater, y en varias series de dibujos animados de la productora Neptuno Films.
Cierto día, y con las miras puestas en resucitar a Zipi y Zape, Ediciones B
volvió a llamar a su puerta. Así pues, y contando con la colaboración de su
buen amigo Ramis, los hermanos más famosos del mundo del cómic volvieron a la
palestra a lo largo de 8 únicos números, volviendo a desaparecer sin previo
aviso. Pero el tándem Cera-Ramis seguía en activo, dibujando páginas de otros
de sus personajes más gamberros y longevos: Los Xunguis, unos (nada) amigables
extraterrestres que acaban liándola parda allí por donde pisan y que vieron
la luz, por vez primera, en 1992.
En 2004, y tras varios años de
hibernación, regresó Pafman, el superhéroe más alocado del panorama nacional
con permiso de Superlópez. Pero las alegrías duraron poco, ya que, la misma
editorial que propuso su relanzamiento, algunos números después, ordenó su
incineración. Una lástima.
Pafman nació en 1987, en el
número 5 de la revista “Mortadelo”
(su primera historieta se tituló: El secuestro). En sus inicios, sus aventuras
se desarrollaban a lo largo y ancho de dos páginas, pero, dado el éxito del personaje,
éstas pasaron a ser cuatro en poco tiempo. Pafman, el superhéroe español por
excelencia, luchó contra el mal (o lo intentó) e hizo y deshizo como le dio la
gana hasta 1996, año que Ediciones B decidió arrojarlo al fondo del mar atado a
una gigantesca rueda de molino. Pero nuestro héroe, como tal, logró liberarse
de sus ataduras y emergió de las profundidades, llegando de nuevo a las tiendas
en 2004 con una nueva aventura larga: Pafman redevuelve.
Así, y a lo largo de los años
siguientes, aparecieron los álbumes: La noche de los vivos murientes (publicado
en 2005), Pafman in U.S.A. (2006), Cabezones del espacio (2007), 1944 (2008), Agente
cero cero patatero (2009) y Pafdark, el cabestro oscuro (2010), de periodicidad
anual. Ya en 2011, con el álbum En la tierra mediocre, la serie estrena nuevo
formato y nueva colección, pasando de los tradicionales Top Cómic a Las
crónicas de Pafman, donde los volúmenes ganan en número de páginas pero pierden
en tamaño y, encima, pasan al blanco y negro. Su siguiente álbum: La aventura
del Titaidón, publicado en 2013, es, de momento, el último publicado del
personaje. Lo más lamentable es que, hasta la fecha, no hay prevista ninguna
nueva aventura.
Página original de Pafman, de Joaquín Cera.