domingo, 17 de noviembre de 2013

DEDICATORIA DE JOAN BOIX: EL CAPITÁN TRUENO



El pasado día 9 de noviembre (sábado), se celebraron las XVI Jornadas del Cómic de Almería. Como cada año, el acto fue presidido por un autor de prestigio nacional e internacional, quien es invitado a dicho evento y donde se habla largo y tendido acerca de su trayectoria profesional. Este año, el homenajeado ha sido Joan Boix, y yo, como admirador incondicional y amigo, no podía faltar a la cita.






Así pues, el mencionado día, puse en marcha mi vehículo y emprendí el viaje hacia Almería. Unas dos horas y cuarto después, ya me encontraba dando vueltas como un loco intentando localizar un aparcamiento por el que no me tuviese que rascar el bolsillo. Y tuve suerte. A dos calles de mi destino, pude estacionar mi Seat en línea azul, pero como era sábado por la tarde, estaba exento de pago. Como ya es habitual en mí en este tipo de eventos, iba cargado con una bolsa llena de cómics y con mi cámara fotográfica a cuestas.

Llegamos hasta el lugar en cuestión (La Escuela Municipal de Música de Almería), y fuimos los primeros en acceder al edificio. Las actividades previstas para esa tarde se repartían en el siguiente horario:

17.00 horas: Sesión de firmas de las obras del autor invitado (Joan Boix) y del resto de autores presentes en las XVI Jornadas.

19.00 horas: Presentación del “Tebeolandia Número 8: Especial Joan Boix” por el maquetista Emilio Navarro, el director Diego Cara y el colaborador Miguel Ángel Blanco González, con la presencia del homenajeado.

19.45 horas: Charla coloquio con Joan Boix, «Más de medio siglo haciendo viñetas: de Hazañas Bélicas a El Hombre Enmascarado», ilustrada por un pequeño audiovisual creado por Moviola Films.

21.30 horas: Entrega del Trofeo Trueno de Honor 2013 al autor homenajeado.

22.00 horas: Acto de clausura de las XVI Jornadas del cómic de Almería y foto de familia. 

Antes de proceder a ponerme en cola para las firmas, accedí hasta una sala donde se encontraba una exposición de reproducciones de planchas originales de Joan Boix. Ahí se hallaban expuestas varias páginas de The Phantom, otras de historias de terror y también el original que Boix realizó para el cartel de presentación de las XVI Jornadas del Cómic.




























Fotos, fotos y más fotos. Ahí estuve un buen rato inmortalizando el lugar para después pasar al siguiente nivel de la tarde: la firma de álbumes. Subimos hasta la primera planta, donde había un stand con varios cómics y merchandising elaborado expresamente para la ocasión. Tras realizar algunas compras, y como a quien madruga Dios le ayuda, fuimos los primeros en pasar a aquella sala (salón de actos) y los que mejor sitio pillamos entre sus numerosas butacas. Y aguardamos la llegada del autor. 


En esta foto podemos ver el cartel de las XVI Jornadas del cómic de Almería, el número 8 de la revista Tebeolandia, un marcapáginas y algunos calendarios con dibujos de Joan Boix, entre otros. Esta es una gran parte del merchandising que pude recopilar esa tarde.






El primero en subirse al escenario y sentarse en su silla fue Manuel M. Vidal. Después lo hizo Pilar Quirosa y, por último, Joan Boix, quien me lanzó un saludo nada más subirse al escenario.




Y todo transcurrió según lo previsto. La firma dio comienzo y yo subí el tercero al escenario. Ante mi presencia, Joan se puso en pie y ambos nos fundimos en un abrazo. Después, estuvimos un rato charlando acerca de los álbumes que yo llevaba: Grandes de lo macabro, Ensayos de ficción y Sombrío, tres tomos que recopilan algunas de las mejores historias de terror creadas por el autor. 






También me llevé El Capitán Trueno, El último combate, pero de ese hablamos menos (después supe las razones). Tras plasmarme una dedicatoria en cada uno de los tres primeros tomos mencionados, Joan Boix pasó a dibujarme un Capitán Trueno en el álbum del mismo personaje, el cual, podéis ver y disfrutar más abajo.




Y la tarde continuó avanzando. Posteriormente a las firmas, se dio paso a la presentación del Tebeolandia número 8. Tras ésta, se inició una proyección (muy bien realizada, por cierto) que hacía un repaso de la larga trayectoria profesional de Boix.

Una vez finalizada dicha proyección, dio comienzo una charla en la que el autor nos puso al corriente de toda su obra, desde sus primerísimos comienzos en 1962 hasta los proyectos futuros que ya rondan por su cabeza.

Dejemos que sea el propio Joan Boix el que nos relate los puntos más destacados de esta charla:

“Todo empezó en 1959 en una tienda. Mis padres tenían un comercio y empecé a practicar sobre el mostrador. Yo tenía 14 años. Alternaba el dibujar con atender a los clientes. Desde siempre, me influyó mucho El Capitán Trueno, y practicaba dibujando a este personaje. Incluso llegué a crear un personaje que se llamaba El Capitán Rayo, del cual, aún conservo los originales como una joya. Nunca se lo he mostrado a nadie, pero lo tengo guardado como una reliquia. Era un cuadernillo de 10 páginas, del cual, lo hice todo: primero el guión, luego los dibujos, rotulación, portada… La portada estaba coloreada con lápices de colores, y más tarde, ya me atrevía con acuarela”.

“Entré en Editorial Bruguera con 16 años. Allí me dieron mi primer guión, el cual, constaba de tres páginas. Fue publicado en la revista “Sissi Juvenil” y titulado Un muchacho tímido”.

“Después me fui a Ediciones Toray, a los 17 años, así por las buenas. Allí me recibió el señor Sotillos (director de la editorial) y yo le llevé algunas páginas mías publicadas anteriormente. Me dijo que le gustaban y que si quería trabajar para ellos en Hazañas Bélicas. Lógicamente respondí que sí. Y me dijo que si lo hacía existía una condición: que tenía que dejar Bruguera y trabajar en exclusiva para ellos. Me dijo que si hacía esto, me pagarían 300 pesetas más por página, el sueldo medio de una persona al mes”.

“Otra condición que me puso el señor Sotillos era que tenía que imitar el estilo de Boixcar. Y así lo hice. Pero conforme iba dibujando historietas, me iba alejando poco a poco del trazo de Boixcar e iba plasmando el mío propio. Y Sotillos se dio cuenta de esto y me llamó un día a su despacho. Me dijo que le gustaba más cómo dibujaba hace un año que ahora, a pesar de que en ese momento yo ya dibujaba bastante mejor. Se enfadó mucho y me cesó de Hazañas Bélicas. Por suerte, no me despidió. Me ofreció guiones de tema romántico y del oeste”.
 
“Después volví a dibujar historietas para niñas, también para Toray, a la misma vez que hacía otras del oeste. Al poco tiempo me volvieron a llamar de Bruguera, y yo empecé a trabajar para ambas editoriales. Entonces me centré en el tema romántico”.

“Quiero contar una curiosidad. Cuando hice Aníbal, para Ediciones Galaor, yo tenía un vecino de unos 14 años que le gustaba mucho el dibujo. Yo estaba haciendo el lápiz de Aníbal y le dije que si quería pasar él los contornos a tinta. Me dijo que sí. Una vez que estaban todos pasados, entonces yo me encargaba de abacar los negros. Lo hice con la intención de estimular a este chaval, quien quería encontrar su camino como dibujante de cómics. Como yo no hice este trabajo completo, firmé, tanto en portada como en el resto de las historietas, como J. Buixadera, pero con la forma de mi firma. Quise poner el nombre de este, digamos, alumno o ayudante”.





“Cuando trabajas para agencias, haces cosas que no sabes dónde van a ir a parar, porque ni te lo dicen ni te dan ejemplares. Una vez vi en Bardon Art (una agencia para la que trabajaba) una revista que incluía un trabajo mío. Era una historieta suelta de Robny el vagabundo. No sé en qué país se publicó, no me lo quisieron decir. Esta publicación estaba en el despacho de Bardon y allí salía un dibujito de mi personaje. Y me llamó la atención. Entonces pregunté si me dejaban mirar aquella revista. Ahí se dieron cuenta de que los había pillado. Todas las agencias querían ocultar dónde iban tus trabajos. No sabías si iban a Holanda, Inglaterra… donde sea. Entonces, comido por la curiosidad, pregunté si me daban aquella revista. La agarraron, la abrieron, buscaron a Robny y me preguntaron si aquellas eras mis páginas, las arrancaron y me las dieron, para que no supiera dónde se publicó aquello. Esto es la primera vez que lo cuento. A partir de ahí, ya no quise saber nada de las agencias. Para el que no lo sepa, a las agencias se les cedía un material que luego se encargaban de gestionar su venta a países del extranjero. Cuando estas páginas se vendían, te las pagaban y ya jamás volvías a saber de ellas, ni en qué país se publicaban ni nada”.

“En 1965 fundé en Badalona la primera escuela de cómics de Europa: Boix Studio. No confundir esta escuela de cómics con las de dibujo y pintura que ha habido toda la vida. Tenía más de 40 alumnos. Ahora, en la actualidad, tendré unos 14, y porque algunos se han dado de baja por la crisis…” 

“En 2009, un día me llama Francisco Sánchez, el gerente de Ediciones B por aquellos entonces, y me comenta que qué me parecería dibujar una nueva aventura de El Capitán Trueno. A mí, que siempre me había gustado Ambrós, del que me considero un gran fan, me pareció una idea estupenda. La aventura se titulaba El último combate, y el guión lo había escrito Ricard Ferrándiz, quien se cargó al Capitán y a Sigrid levantando la más grande de las polémicas. Yo, como dibujante de este álbum, nada tuve que ver con estas innecesarias muertes. Mi función era seguir el guión tal cual. Cuando estoy a medio de hacerlo, me llaman de la editorial y empiezan a meterme prisa. Me dijeron que eso tenía que estar para tal día, y yo les dije que se tenían que fastidiar porque no iba a estar. Estará cuando yo la termine, y ya está. Y tuve que acelerar el trabajo. Cuando me dieron el guión no me dijeron fecha de entrega, y yo iba haciendo páginas poco a poco”.

Para el que le pueda interesar, en su día publiqué en este mismo blog una entrada especial dedicada a Joan Boix, en la que hablé, largo y tendido, acerca de su extensa obra, añadiendo, como colofón final, una interesante y completa entrevista realizada por un servidor: http://elblogdejuanantonioros.blogspot.com.es/2013/04/he-man-y-los-masters-del-universo-de.html

Tras la charla, algunos de los presentes le lanzaron algunas preguntas y, posteriormente, se dio paso a los agradecimientos y a la entrega del Trofeo Trueno de Honor 2013, que el autor recibió con gran emoción. Como punto final de la tarde, los presentes nos hicimos una foto familiar con Boix.














Mi reloj marcaba casi las 22.00 horas, y llegó el momento de la despedida. Debo confesar que me entristecía que acabara aquella tarde, pero su final era inevitable. Aún sobre el escenario, Joan y yo nos volvimos a fundir en un fuerte abrazo y nos deseamos lo mejor mutuamente, y agarrando mi cámara de fotos y mi bolsa de cómics, abandonamos aquel lugar casi con lágrimas en los ojos. 




Un largo viaje de regreso me esperaba aún por delante. Casi dos horas y media de trayecto que me sirvieron para reflexionar sobre todo lo acontecido esa tarde, para archivar en mi mente cierta información que no debía olvidar y para recordar cada minuto de los allí vividos con gran emoción. Sin duda, un acto inolvidable del que me llevo muy buenos recuerdos.

Gracias Joan, por tratarme como lo hiciste.



 Un servidor posando orgulloso con su dedicatoria de Trueno.






2 comentarios:

  1. Juan Antonio, gracias por contar en tu blog con todo detalle, lo acontecido en las XVI Jornadas del Cómic de Almería. ¿Grabaste todo lo que expliqué, o lo memorizaste? Anda que si es así tienes memoria de elefante! Es exactamente todo lo que yo dije... ni más ni menos. Te felicito y agradezco
    esta entrada tan bien contada en tu blog, amigo mío! Un abrazo.

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  2. Hola Joan.

    Supuso para mí una alegría enorme el haber podido conocerte en persona después de todo este tiempo. Disfruté y aprendí mucho esa tarde contigo en Almería, y quería plasmar en esta entrada todo lo acontecido con el mayor detalle posible. Espero haberlo conseguido.

    Por lo que me preguntas sobre la charla, aunque me reste méritos, diré que la grabé de principio a fin para después redactar aquellos puntos que consideré más importantes. A ciertas edades, la memoria ya no es tan eficiente.

    Muchas gracias por tus palabras de agradecimiento.

    Un fuerte abrazo.

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